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El Primer Periodico Independiente
del Rincon Mas Bello y Mas Verde del Ecuador
Inteños organizan giras de observación
By Hugo Robalino Fernández

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Estudiantes de la Unidad Educativa a Distancia de Imbabura (UNEDI), de las extensiones de Chalguayaco y Chontal, visitaron algunas experiencias de permacultura, agricultura orgánica y fruticultura en el país. En la provincia de Manabí, fueron a fincas en Rio Muchacho y en Pichincha hicieron escalas en Puembo y Rio Guaycuyacu. Las giras son parte de su formación técnica de la entidad educativa y son posibles gracias al aporte de la fundación Pro Derechos Ciudadanos (PRODECI).

 

La primera escuela ambientalista reconocida por el Ministerio
Los jóvenes inteños conocieron en esa finca técnicas de ensilaje para ganado vacuno, manejo integral de cerdos, manejo de cuyes y gallinas, energía alternativa, cultivos asociados, agroturismo, entre otras opciones productivas. La finca de Rio Muchacho es autosuficiente y allí practican la permacultura. El 99 porciento de los alimentos que los habitantes consumen son producidos por la misma finca.
Según Dario Proaño, dueño de la finca, la permacultura es el arte de replicar lo que la naturaleza realiza. Es decir, respetar el entorno y utilizar estrictamente lo que es necesario para vivir dignamente. La permacultura implica el trato noble hacia los animales y las plantas, y el uso de abono orgánico. Además, enfatizó que los microorganismos del suelo son vitales para la sostenibilidad de la vida humana.
Una de las actividades novedosas de Rio Muchacho es la implementación del sistema “Maracuyá 21” (M21), esto es, la asociación de 21 especies alrededor del cultivo del maracuyá para mejorar la calidad del fruto. Se asocian especies frutales y agrícolas en un sistema que garantiza la seguridad alimentaria y el control de plagas.
El sistema es socializando y ejecutando con los niños de la primera escuela ambientalista del país reconocida por el Ministerio de Educación. Sus profesores reciben asesoramiento de la finca Rio Muchacho y tienen una formación ambientalista.

Agricultura orgánica en Puembo
altLos estudiantes también fueron a la finca del agricultor Francisco Gangotena. Él les explicó sobre su trabajo en la tierra. Junto con su esposa, hace más de 15 años decidió comprar la finca de cuatro hectáreas para producir de forma orgánica. Ahora han posicionado sus productos en un mercado difícil de incursionar, pero seguro para la salud humana y para el suelo, comentó. Su finca es una muestra de la distribución de cultivos y de uso de abono orgánico. Para Pancho, esta es la parte más importante porque así alimenta el suelo y multiplica los microorganismos benéficos.
Una de las cosas que más impresionó a los estudiantes es la forma de controlar las plagas. Por toda la finca hay hileras de flores como el eneldo. Éstas atraen insectos que podrían comerse las hojas de las hortalizas. Explica que ha investigando cuales insectos son beneficiosos, cuales son dañinos y cuales se devoran o atacan entre sí. Estos conocimientos los ha utilizado para no usar insecticidas químicos.

Agricultura sostenible en Río Guaycuyacu
La finca de Jaime West es una de las más reconocidas por la diversidad de plantas frutales. La fruticultura es una actividad rentable, asegura. La finca es reconocida como una de las mejores muestras o colecciones de plantas frutales. Hay alrededor de 500 especies distintas, entre árboles, arbustos y trepadoras frutales. El estadounidense Jaime West y su esposa Mimi Foyle llegaron al noorocidente de Pichincha hace 23 años para  hacer agricultura sostenible.
Antes de iniciar el recorrido por la finca, los anfitriones nos invitaron a degustar una gran variedad de frutas recién cosechadas. Luego el agricultor nos dio el habitual recorrido por la finca.
Explicó a los estudiantes sobre la distribución de las plantas, las pocas labores de limpieza porque al tener cubierto con vegetación el terreno le permite mantener siempre con humedad el suelo. Durante el recorrido, comentó sobre la reproducción y multiplicación de las plantas frutales, las semillas y acodos. El producto: frutas con similitud de características tanto en sabor como en características físicas.
Antes de regresar a casa los estudiantes degustan de un almuerzo netamente vegetariano y con alimentos producidos en la misma finca, lo cual es el orgullo de Mimi Foyle.
Finalmente, el coordinador de la especialidad agropecuario forestal, el ingeniero Ernesto Mejía, les da un mensaje a los estudiantes: Que aprovechen estas giras para que los conocimientos adquiridos los puedan replicar en sus fincas, porque solo lo que en práctica se pone jamás la mente olvida.